domingo, 7 de junio de 2009

El PP vuelve a impedir que Salamanca retire los honores a Franco


El cabildo presidido por Julián Lanzarote ha torpedeado por tercera vez los intentos del PSOE local de quitar a Francisco Franco la Medalla de Oro y el título de Alcalde de Honor Perpetuo de Salamanca. El dictador obtuvo el primer reconocimiento el 12 de marzo de 1948 y el segundo en 1964. En palabras del portavoz municipal socialista, Fernando Pablos, “ambos nombramientos son lesivos para la imagen pública de Salamanca y no pueden ser aceptados por una Corporación Democrática”. Pablos ha instado al Ejecutivo local a seguir el ejemplo de “numerosas instituciones (ayuntamientos y diputaciones) de España que ya han retirado todos los honores a Franco, incluso con el voto a favor del PP”.
Ayer, la mayoría absoluta del PP en el Ayuntamiento salmantino echó por tierra el tercer intento socialista de retirar los títulos a Franco. La moción interpuesta por el grupo recordaba que las circunstancias en las que se concedieron los galardones fueron las propias de “una Dictadura Militar que asoló a España”.
Pleitesía a Franco
Para el PSOE municipal, el “único objetivo” de las condecoraciones “era rendir pleitesía al dictador por una parte de la Corporación no elegida por los ciudadanos, sino directamente por autoridades de la época fieles a la Dictadura”. El grupo entiende, en consecuencia, que recuperada la democracia es “lesivo para la imagen pública de Salamanca” mantener estos honores.
Por obras y sacrificios
La Medalla de la Ciudad de Salamanca contempla las modalidades de Oro y Plata y se creó el 12 de marzo de 1948, siendo alcalde Luis Fernández Alonso, para testimoniar gratitud, honor y cariño a quienes obsequian “a la Ciudad o a la Patria con sus obras y sacrificios, ostensibles y constantes pruebas de beneficio, prestigio y amor” .
Primera Medalla y Alcaldía honorífica
El mismo día en que creó el galardón, el Gobierno de Fernández decidió “ofrecer y otorgar al que fue su egregio vecino en los actos triunfales de 1937 y 1938 y por imperativo histórico al eterno Caudillo y Salvador de España, Francisco Franco, la primera Medalla de Oro de la Ciudad”, eludiendo incluso la prescrita “substantación de un expediente”. Posteriormente, el 1 de abril de 1964, Salamanca decidió nombrar al dictador su Alcalde de Honor a perpetuidad, un título que todavía conserva.

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