miércoles, 9 de diciembre de 2009

PSOE y UGT homenajean a Pablo Iglesias en el 84 aniversario de su muerte

El 9 de diciembre de 1925, una procesión proletaria de 150.000 personas recorría cabizbaja las calles de Madrid arropando a una carroza tirada por caballos que portaba un feretro: en él yacía un líder del movimiento obrero, Pablo Iglesias, fundador del PSOE y de UGT.

Ambas formaciones rendirán hoy homenaje a su fundador en el 84 aniversario de su fallecimiento. El acto tendrá lugar a las 12.00 horas en el Cementerio Civil de Madrid, donde se recordará la figura de Iglesias.

Al homenaje acudirán el secretario general de UGT, Cándido Méndez; la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín y el secretario general del PSM, Tomás Gómez, entre otros.

"Timbre de la verdad humana"

Dijo el poeta Antonio Machado que siendo un niño escuchó a Pablo Iglesias en un mitin y que siempre recordó su voz "como el timbre inconfundible de la verdad humana".

Pablo Iglesias Posse fue testigo y actor protagonista de su tiempo. De ascendencia humilde, nació en el 18 de octubre de 1850 en El Ferrol, A Coruña. Paulino, como le llamaban familiarmente, asiste a la escuela desde los seis hasta los nueve años, momento en el que muere su padre, un peón municipal, y se traslada a vivir a Madrid en compañía de su madre y su hermano menor.

En el Hospicio de San Fernando acaba los estudios primarios y elige el curso de tipógrafo como oficio a aprender. Ejerce su profesión en diferentes imprentas, mejorando poco a poco su salario hasta que el joven Iglesias comprende la lucha de clases cuando es despedido por sumarse a una huelga. Fue el comienzo de una vida de activismo político.

Al amparo de las libertades que otorga la Constitución de 1869, la sección española de la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT) organiza una serie de conferencias en Madrid y a ellas asiste Iglesias y, en 1870, solicita su ingreso en la sección de tipógrafos.

Fundador del PSOE y UGT

Ese fue el comienzo de un camino que le abocó a ser un líder del movimiento obrero. Una lucha que le llevó el 22 de mayo de 1879, en un banquete clandestino de fraternidad internacional celebrado en Madrid, a encabezar junto a otras veinticinco personas a la fundación del Partido Socialista Obrero Español, el segundo partido obrero de los que se constituirían en el mundo.

En repetidas ocasiones irá a la cárcel por su cada vez mayor activismo político. En el año 1888, a las 10.30 horas del 12 de agosto, veintiséis hombres tomaban asiento en el salón del Círculo Socialista ubicado en la calle Tallers, 29, de Barcelona, para iniciar el Primer Congreso Nacional Obrero. En ese congreso Pablo Iglesias proponía que la nueva Organización obrera llevara por nombre "Unión General de Trabajadores de España". Había nacido el síndicato UGT.

En 1905 fue elegido por primera vez concejal del Ayuntamiento de Madrid y en las elecciones de junio de 1910, gracias a la alianza republicano-socialista a la que se había opuesto Iglesias, fue electo con el respaldo de 40.899 votos primer diputado socialista que entra en el Parlamento español.

Su salud se deteriora en 1921, cuando se produce la escisión del partido: el PSOE, con el apoyo de Iglesias, adopta la línea socialdemócrata en contra de la III Internacional. Esa rama del partido pasó al Partido Comunista Obrero Español.

Mantuvo su compromiso con la clase trabajadora hasta la vispera de su muerte. "El proletariado vencerá" fue el título del último artículo escrito por Iglesias, publicado en el periódico El Socialista, resumía los objetivos de su vida un día antes de su muerte. "El ideario de los proletarios -decía en él Iglesias- está dictado por la razón e inspirado por la justicia, y hagan lo que hagan sus enemigos, vencerá, como viene venciendo desde que los opresores han adquirido conciencia bastante de su valer y de su fuerza ".

jueves, 3 de diciembre de 2009

"Manifiesto en defensa de los derechos fundamentales en Internet"

1.- Los derechos de autor no pueden situarse por encima de los derechos fundamentales de los ciudadanos, como el derecho a la privacidad, a la seguridad, a la presunción de inocencia, a la tutela judicial efectiva y a la libertad de expresión.

2.- La suspensión de derechos fundamentales es y debe seguir siendo competencia exclusiva del poder judicial. Ni un cierre sin sentencia. Este anteproyecto, en contra de lo establecido en el artículo 20.5 de la Constitución, pone en manos de un órgano no judicial -un organismo dependiente del ministerio de Cultura-, la potestad de impedir a los ciudadanos españoles el acceso a cualquier página web.

3.- La nueva legislación creará inseguridad jurídica en todo el sector tecnológico español, perjudicando uno de los pocos campos de desarrollo y futuro de nuestra economía, entorpeciendo la creación de empresas, introduciendo trabas a la libre competencia y ralentizando su proyección internacional.

4.- La nueva legislación propuesta amenaza a los nuevos creadores y entorpece la creación cultural. Con Internet y los sucesivos avances tecnológicos se ha democratizado extraordinariamente la creación y emisión de contenidos de todo tipo, que ya no provienen prevalentemente de las industrias culturales tradicionales, sino de multitud de fuentes diferentes.

5.- Los autores, como todos los trabajadores, tienen derecho a vivir de su trabajo con nuevas ideas creativas, modelos de negocio y actividades asociadas a sus creaciones. Intentar sostener con cambios legislativos a una industria obsoleta que no sabe adaptarse a este nuevo entorno no es ni justo ni realista. Si su modelo de negocio se basaba en el control de las copias de las obras y en Internet no es posible sin vulnerar derechos fundamentales, deberían buscar otro modelo.

6.- Consideramos que las industrias culturales necesitan para sobrevivir alternativas modernas, eficaces, creíbles y asequibles y que se adecuen a los nuevos usos sociales, en lugar de limitaciones tan desproporcionadas como ineficaces para el fin que dicen perseguir.

7.- Internet debe funcionar de forma libre y sin interferencias políticas auspiciadas por sectores que pretenden perpetuar obsoletos modelos de negocio e imposibilitar que el saber humano siga siendo libre.

8.- Exigimos que el Gobierno garantice por ley la neutralidad de la Red en España, ante cualquier presión que pueda producirse, como marco para el desarrollo de una economía sostenible y realista de cara al futuro.

9.- Proponemos una verdadera reforma del derecho de propiedad intelectual orientada a su fin: devolver a la sociedad el conocimiento, promover el dominio público y limitar los abusos de las entidades gestoras.

10.- En democracia las leyes y sus modificaciones deben aprobarse tras el oportuno debate público y habiendo consultado previamente a todas las partes implicadas. No es de recibo que se realicen cambios legislativos que afectan a derechos fundamentales en una ley no orgánica y que versa sobre otra materia.